Datos curiosos sobre la personalidad de los que se hacen tatuajes (1)
Las características de nuestra personalidad pueden influir en si nos tatuamos o no y en qué parte del cuerpo.
Seguro que si tienes al menos un tatuaje en tu cuerpo hayas sentido la necesidad de volver a experimentar la tinta en tu piel. Y es que los tatuajes, amados por muchos y mal vistos por otros, nacen de la necesidad de definirse, ser singular o una persona única, reafirmarse, comprometerse y, al parecer, todo son ganancias para quien decide dar el paso.
«Después del primer tatuaje, se le pierde el miedo, pudiendo llegar a ser algo adictivo para algunas personas», explica Sheila Estévez Vallejo, psicóloga especialista en conflictos emocionales. La adrenalina inicial y las endorfinas posteriores tienen un papel fundamental, de aquí la necesidad de muchas personas de seguir tatuándose.
